La leyenda de los llamadores de Angeles
¿ Que es un llamador de Ángel ?. Un llamador de ángeles es una esfera de plata de ley que emite un armonioso sonido cuando es agitada. Cuenta la leyenda que otorga la faculta de proteger y ayudar al bienestar de quien lo posee.
El llamador de Ángel se lleva a modo de colgante en el cuello, pudiendo ser tambien ubicado en el hogar normalmente en una puerta o en la cuna para que cuando este se mueva emita el sonido. El llamador de Ángel es de beneficio esclusivo para la persona que lo lleva, este protegería también al futuro bebé que esta por nacer. Es por ello que utilizaremos una cadena de larga para que el llamador quede a la altura del bebé. Una vez que el bebé haya nacido, el llamador solamente puede ser utilizado por uno de los dos, la madre o el bebé.
Ese sonido armonioso y agradable que emite el llamador de Ángeles y segun cuenta la leyenda, es un sonido que avisa a nuestro Ángel de la Guarda, de quien necesitamos su presencia. Hay muchas leyendas sobre los llamadores de Ángeles, pero vamos a escoger una leyenda de origen Celta.
Hace miles de años., los humanos vivían en continuo contacto con los Ángeles de la guarda y posiblemente por una razon originada por un pecado, tuviero que dejar de vivir juntos. Los Ángeles apenados por tener que dejar la compañia de los humanos , regalarón a éstos con unos colgantes de plata pura que al moverlos sonaban como campanillas.
Estas esferas eran un simbolo de protección. Antes de marcharse les explicarón que aunque no estarian fisicamente cuando sintieran peligro o necesitados solamente tenian que agitar la esfera y que el Ángel de la guarda acudira en su ayuda. Y como unica condición seria que el colgante fuese de uso exclusivamente personal, ya que cada uno emitia un sonido propio y reconocible por cada Ángel de la Guarda. A su vez le explicaron que el colgante podria ser usado por la madre y su bebé mientras éste estaba en estado de gestación, ya que ambos comparten el mismo Ángel de la guarda. Cuando el bebé naciera este debia ser de uso de la madre o del bebé exclusivamente.